Cuando estaba en segundo grado (7 años) estudiaba en una escuela pública que quedaba un poco lejos de mi casa, así que tenía un transporte.
No sé dónde mi mamá encontraba a la gente que me hacía transporte, y este sujeto, el señor Wilmer, no era la excepción.
Al menos cumplía su función: me llevaba y traía, cada día, de lunes a viernes, de mi casa a la escuela y de la escuela a mi casa.
Todo bien hasta ahí.
La cosa es que, la mayoría de las veces, me buscaba temprano, y quedaba tiempo para pasar por su casa de camino a la escuela.
Así que llegábamos a su casa, y sin bajarnos del carro, su esposa lo recibía afuera con desayuno y una tacita de café.
Sí, así como Doña Florinda al profesor Jirafales.
Linda escena, me parecía tierno.
Por poco tiempo.
La escena era rápida.
Él estaba apurado, y no para llevarme a la escuela, sino porque en la esquina de su casa, un poco escondida entre los árboles, lo esperaba una muchacha más joven y atractiva, a la que él, mientras apoyado en la ventana del auto, le hablaba suavecito.
Y yo en el asiento trasero, observando todo.
¿Aja y?
¿Tú también te diste cuenta de lo que pasaba?
Pensaría él que yo con 7 años no me enteraba de nada, pero los niños observan, y aprenden de LA FACULTAD DE LA VIDA.
Todo el tiempo sus mentes están trabajando, chiquipum, chiquipum, observando.
Son superpilas.
Yo sabía que estaba mal, y me daba asco.
Me sentía muy molesta.
Y hasta quería contarle a su esposa (quien me saludaba cada mañana con una sonrisa) por medio de una carta anónima + letra garabateada de 2do grado, las andanzas de su esposo justo después de ella despedirlo.
Pero tenía otras tareas (aka exposiciones, maquetas del sistema solar, y el mundo animal, etc.) que hacer y trabajar exponiendo infieles no era una de ellas.
Ja.
El asunto es que yo con 7 años me di cuenta de esa incoherencia, entre lo que le decía a su esposa, y lo que realmente hacía.
Ahora, más grande, sigo observando incoherencias, esta vez con…
Exacto, infoproductos.
Desde mi experiencia, he mirado unos cuantos infoproductos (cualquier contenido educativo por el que pagues) y he encontrado muuuuchas incoherencias.
La más común: over promise, under deliver (sí, al revés).
Te prometen villas y castillas, y al final hasta pierdes la silla.
Eso es malísimo.
Se nota que el interés es solo transaccionar, y cero ayudar.
Pagar por algo y quedar peor.
Entonces este montón de señores (y señoras) Wilmer, se creen que tenemos 7 años y que no nos enteramos de nada.
Ja, error.
Error que va directo a la yugular de la marca personal.
Destruye la confianza.
Arruina reputaciones, y,
Provoca que les llamen esa palabra que comienza en “vende” y termina en “humos”.
En todo caso, recuerda que recomiendan “under promise, over deliver”.
Yo lo tengo claro cuando hago un infoproducto, ¿y tú? No seas un señor Wilmer.
Por fita.
Aunque si lo eres, te lo diré.
adriana :)
PD: No le dije nada a la esposa porque no era mi problema.
PD2: Mentira, fue porque me cambié de escuela.
PD3: Voy a buscarla en Facebook para contarle.
PD4: Mentira, tengo otras tareas que hacer (no son maquetas del sistema solar).
Aja, sigo aquí
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Ahora sí.
:)
Ya me enteré de qué es un infoproducto (chiquipumchiquipumobservando)