Recientemente, he coincidido con varias personas reacias a aprender. Creo que se sienten cómodas con lo que ya saben y no quieren enfrentarse a la idea de que pueden estar equivocadas, que hay cosas que no saben, o ambas.
Me sor-pren-de.
El aprendizaje continuo es esencial para el crecimiento personal y profesional. De hecho, muchos avances en la historia han sido gracias a personas que fueron curiosas, cuestionaron lo existente, y buscaron nuevas soluciones.
Así que estar abiertos a aprender no solo nos enriquece individualmente, sino colectivamente.
¿Cómo sería la vida de alguien que lo sabe todo?
He reflexionado sobre eso, y me he reído. Aquí va:
No se riera de los chistes, porque ya los sabe.
¿Una pandemia mundial repentina? No le asombra, ya sabía que sucedería.
Una película/serie top, de 5 estrellas, no la disfruta porque anticipa la trama y nada le toma por sorpresa
Viaja y no se asombra ante las maravillas del mundo, es más, ni toma fotos para el recuerdo, ¿Para qué? Si ya sabe como son todos los lugares.
Relaciones interpersonales, si ya conoce todo de alguien, ¿Cómo disfrutaría de su compañía? Si cada cosa que le va a decir, la sabe, se aburriría de conversar con esa persona o fingiría interés.
No necesitaría estudiar para un examen. Incluye no sentir la adrenalina de dejarlo para última hora.
En su cumpleaños, si sus amigos le hacen una fiesta sorpresa, al llegar al lugar les dice, “Ya sé que están ahí.”
¿Pedir consejos? ¿Ir al psicólogo? Ni sabe para qué existe esa profesión, sabe cómo manejar sus emociones y tomar buenas decisiones.
Alguien obtiene un reconocimiento o logro, y piensa, “Más bien se tardó en conseguirlo.”
¡Menuda locura! Una vida terrible, la verdad. Esto me recordó al cuadrante del saber, o la ventana de Johari. Este modelo describe los estados de conocimiento y conciencia.
Sé que sé (Conocimiento explícito): El conocimiento que una persona es consciente de tener. Por ejemplo, sabes cómo dibujar y sabes que lo haces muy bien.
Sé que no sé (Conocimiento implícito): La conciencia de que hay cosas que no sabes. Ejemplo, sabes que no sabes cocinar, se te quema el arroz.
No sé que sé (Conocimiento intuitivo): Conocimiento que una persona tiene pero del cual no es consciente. Por ejemplo, se te dan muy bien las matemáticas, con facilidad, pero no te das cuenta de que a los demás no tanto como a ti.
No sé que no sé (Ignorancia inconsciente): La falta de conocimiento o conciencia de algo que ni siquiera sabes que no sabes. Por ejemplo, si nunca has oído hablar de un instrumento musical específico como el Daxophone o el arpa láser y no sabes que existen (De verdad existen).
Hice una versión alternativa de la ventana de Johari para comprender la magnitud de lo que tenemos por delante…
¿Y esto para qué me sirve?
Nos ayuda a comprender que el conocimiento no se limita a lo que sabemos conscientemente.
Nos recuerda la importancia de ser humildes y reconocer que siempre hay más por aprender.
Al reconocer los diferentes estados de conocimiento, nos damos cuenta de todo lo que hay por descubrir. Es un viaje que nunca termina.
Para mí es un recordatorio constante de humildad. Me inspira a seguir explorando, cuestionando y aprendiendo. ¿Y para ti?
Nos leemos.
adriana
PD: El lunes sale a la venta :)
Nunca se terminara de aprender, creo que cada uno aprende de acuerdo a sus intereses y necesidad... A seguir descubriendo y repasar lo aprendido.
Me recuerda a como una persona hace muchos años me dijo cuál era su libro favorito. Unos 8 años después le volví a preguntar lo mismo, y me respondió con el mismo libro.
A mí me dio la impresión de que había leído poco, porque el que lee mucho, va cambiando de libro favorito con el tiempo.
Tu publicación sobre los que piensan que saben más de lo que realmente saben me recordó esta anécdota.